El ministro Juan Ramón Quintana informó que los focos de calor están concentrados en Roboré, San Matías y Concepción. Los datos muestran que más de dos millones de litros de agua fueron derramados sobre el fuego
El número de focos de calor en la Chiquitanía baja a diario y al momento se contabilizan 142, de los que 38 están en Roboré y el resto San Matías y Concepción. El Gobierno llamó a la población a la tranquilidad en un nueva jornada de operaciones que buscan apagar las llamas en el bosque chiquitano.
"Desde el 7 de agosto hasta hoy, los días de mayor presencia de focos de calor fueron el 17 y 18 de agosto; hemos llegado el 17 a 7.000 y el 18 a 8.000 focos de calor; hoy día tenemos en la Chiquitanía 142 focos de calor", informó la noche de este jueves el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, durante una conferencia de prensa en Roboré.
En horas de la mañana, Morales, tras sostener una reunión con el Gabinete de Emergencia Ambiental, había informado sobre la existencia aún de 684 focos de calor, 342 de los cuales se hallaban en la zona de la Chiquitanía.
Quintana sostuvo que la reactivación del fuego en algunos lugares es producto de los cambios en los vientos y al incremento de la temperatura. "De hecho en la mañana, cuando fuimos con el Presidente a Charagua, nos encontramos con una reactivación que fue aplacada con el Supertanker con una o dos descargas".
"Esa información debiera tranquilizar en primer lugar a la región, al departamento, al país; estamos haciendo un buen trabajo articulado, estamos haciendo un buen trabajo de planificación, estamos leyendo adecuadamente los datos y estamos haciendo una operaciones simultáneas aéreo-terrestres que nos están dando un gran resultado", destacó.
Según Quintana, los incendios se concentran ahora en Roboré, donde aún quedan 38 focos de calor, en San Matías y en Concepción.
Los datos de la operación
Quintana explicó en detalle el trabajo que se realiza en la Chiquitanía desde el 7 de agosto, que es cuando se conformó el primer comando para tareas de mitigación de incendios.
Este jueves, 13 operaciones aéreas fueron ejecutadas en Roboré (6), San Ignacio de Velasco (4) y Puerto Suárez (3); además, de dos operaciones aerotransportadas con personal.
La cantidad de agua que se vació sobre los focos de calor llegó a 204.360 litros, de los cuales 60 mil fueron para aplacar las llamas en Roboré, 120 mil en San Ignacio y 24.9000 en Puerto Suárez.
Otro dato es que el avión 747 Boeing Supertanker, alquilado por el Gobierno, realizó esta jornada cinco vuelos, derramando 370.000 litros sobre las llamas, que sumados a otras descargas contabilizaron 574.960 litros.
De acuerdo al detalle, el Supertanker derramó, desde el 23 de agosto pasado, 1.804.000 litros de agua en 24 operaciones aéreas en Roboré, Puerto Suárez y San Ignacio de Velasco.
"La descarga de agua llegó a 2.869.240 de litros, por parte del Supertanker" y el resto de aeronaves, explicó Quintana.
Las operaciones terrestres llegaron a 54: en Roboré 29, en San Ignacio 21 y en Puerto Suárez 4.
El número de operaciones aéreas en la Chiquitanía desde el pasado 7 de agosto hasta hoy es de 993, con seis operaciones aerotransportadas. "Son casi mil operaciones desde el 7 de agosto", destacó.
De los 34 miembros de las Fuerzas Armadas que fueron movilizados para apagar los incendios el 7 de agosto, ahora llegan a 4.744 integrantes de las FFAA, de los que 1.821 fueron transportados a Roboré; 1.968 a Puerto Suárez y 955 a San Ignacio.
Quintana detalló también que 15 aeronaves, entre ellos dos superpumas y los helicópteros peruanos, apoyan en las labores de mitigación de los focos de calor desde el aire.
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