A cuatro días de darse a conocer la importación de 25.336 kilos de leche del Paraguay destinados al abastecimiento del desayuno escolar en Cochabamba, la Federación de Productores Lecheros (Feprolec) exigió ayer al Gobierno central que prohíba la importación de leche a través de una ley y que incremente los controles para combatir el contrabando del producto.
Los lecheros consideran que la importación agrava la crisis del sector generada por el cambio climático, la caída del precio por litro del producto y el contrabando. Asimismo, representantes del sector anunciaron ayer una marcha masiva para la siguiente semana junto a la Cámara Agropecuaria de Cochabamba (CAC), constituyéndose en la segunda en menos de cuatro meses.
Entre 2007 y 2017, el volumen de importación de leche creció en un 63 por ciento. Sin embargo, desde 2012, la importación del producto se estableció y dejó de crecer, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Representantes del sector productivo denunciaron el pasado lunes que una empresa que provee desayuno escolar en varios municipios importó el pasado 23 de marzo un volumen de 25.336 kilos de leche en polvo elaborada en Paraguay, según el permiso de inocuidad alimentaria de importación al que accedió el sector agropecuario.
Al respecto, el presidente de la CAC y titular de Feprolec, Jhasmany Medrano, lamentó esta situación ya que la cantidad de leche en polvo que ingresó al departamento equivale a una pérdida de 2 millones de bolivianos, que implica la producción de un día de la cuenca de Cochabamba.
“Hemos obtenido la documentación de una sola ocasión en el mes de marzo, no sabemos cuántas veces más han importado, también debemos tomar en cuenta la afectación de Santa Cruz y La Paz”, indicó.
Tras una reunión sostenida ayer entre representantes de la Feprolec de Cochabamba, los mismos determinaron radicalizar sus medidas de presión con una marcha masiva junto a la CAC para solicitar al Gobierno que frene las importaciones legales e ilegales hacia el país.
“Las importaciones van en desmedro de la economía de los productores” señaló.
De esta manera, indicó que solicitaron al Gobierno que implemente una ley que considere que el consumo en alimento escolar o insumos sean de producción nacional. “Estamos pidiendo al Gobierno que endurezca el control en las fronteras e implemente una norma o ley que considere que el consumo sea nacional”, indicó.
Anunció una reunión con la directiva de la CAC para el lunes para definir la fecha de la movilización.
A su turno, un productor del valle alto, Juan Patiño, indicó que la importación de leche los afecta de manera sustancial, ya que la Planta Industrializadora de Leche (PIL) no recoge la totalidad de su producción para la elaboración de sus productos.
25 mil kilos de leche desde Paraguay fueron derivados para la elaboración del desayuno escolar en Cercado, según información proporcionada por la CAC.
TESTIMONIOS
"Nos afecta de gran manera la importación de leche. Tenemos que unirnos entre los dirigentes para exigir al Gobierno que frene este tipo de acciones en desmedro de los productores". Juan Patiño. Productor
"Es una situación que agrava a nuestro sector, nos dan cupos. Es justo y necesario que nos movilicemos ante esta situación, necesitamos ser atendidos por el Gobierno; no nos escuchan". Pedro Rocha. Productor
EL GOBIERNO ACUERDA NO MODIFICAR PRECIOS DE SOYA
El presidente de la Cámara Agropecuaria de Cochabamba (CAC), Jhasmany Medrano, manifestó que recibieron la confirmación del Gobierno para mantener la banda de precios de la soya y sus derivados.
La banda de precios fue fijada en el mes de enero, con vigencia durante el primer semestre del año.
El acuerdo de carácter verbal lo realizó el viceministro de Producción Industrial a Mediana y Gran Escala, Néstor Huanca, quien habría garantizado al sector agropecuario que no incrementarían la banda de precios durante al menos seis meses más.
“Nos informaron que se mantendría la banda de precios, cáscara de soya y harina solvente. Esperemos que el acuerdo se efectivice mediante un acuerdo firmado, estamos haciendo la gestiones”, dijo.
La banda de precios fue establecida a través de una resolución biministerial emitida por los ministerios de Desarrollo Productivo y Economía Plural y Desarrollo Rural y Tierras, que estableció un precio máximo de 416 dólares por tonelada de harina integral de soya, 281 para la harina solvente de soya y 80 para la cascarilla de la oleaginosa.
Por otro lado, determinó un precio mínimo de 396 dólares para la harina integral de soya, 267 para la harina solvente de soya y 60 para la cascarilla.
El pasado 18 de enero, al menos 15 mil productores afiliados a la CAC salieron a las calles en una movilización masiva tras haberse detectado el incrementado el precio de la soya y sus derivados. En aquella ocasión, los productores anunciaron el incremento de la leche, carne de cerdo y de pollo por usar en su producción derivados de la soya.
“La banda se fijaba todos los años, logramos que se establezca la misma también durante este año”, dijo.
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